progresión geométricaExposición individual
Reaparición, observación, transformación Progresión geométrica propone fijar nuestra atención en el fascinante devenir de El Museo de Arte borrado; la sintética imagen que Emilio Hernández Saavedra hiciera en 1970. El interés mostrado por diferentes actores del medio es aval de su relevancia, que sirve como impulso para complejizar su particular derrotero. El Museo de Arte borrado consiste en una manipulación fotográfica a través de la cual Emilio Hernández Saavedra materializó su opinión crítica acerca de la institución museal. Esta imagen aparecida el año 1970, en el catálogo de la exposición Galería de Arte (galería Cultura y Libertad), cobra notoriedad en el medio local a partir del año 20071, aunque ya en 1984 había sido señalada como elemento importante de la escena vanguardista de los años 602. La relevancia Museo de Arte borrado acrecienta su notoriedad e incluso sus dimensiones físicas3; lo cual la desvincula paulatinamente de su contexto original, eclipsando en mayor o menor proporción las demás imágenes que acompañan al catálogo, como también la muestra de la cual formó parte en un inicio. La mirada crítica que lanza Hernández Saavedra sobre la institución museal atrae diversos actores de la escena artística, que tienen particular interés en el tema, e incluso capta la atención del Museo de Arte de Lima; institución aludida en la imagen, la cual al adquirir en 2011 el catálogo que la alberga, juega un papel doblemente protagónico. La muestra se dedica a observar y analizar diferentes rastros, producto de la fricción con el contexto; detalles sutiles o evidentes que son recolectados para proponer una posible biografía de El Museo de Arte borrado, y así tener un panorama que revele diferentes aristas de los procesos creativos y transformativos que se juegan en el terreno de la investigación artística, la crítica y la curaduría. 1. El año 2007 Emilio Tarazona y Miguel A. López presentan “La Persistencia de lo Efímero, orígenes del no-objetualismo peruano: ambientaciones / happenings / arte conceptual (1965 – 1975)”, exposición producto de una larga investigación sobre la escena vanguardista de aquellos años, de la cual se tenía mínimo rastro. Esta muestra visibiliza, entre otros, el trabajo de Emilio Hernández Saavedra. 2. Bajo el seudónimo de Sebastián Gris, Gustavo Buntinx cura en 1984 la muestra “Las vanguardias de los años sesenta” en la Sala de Exposiciones de la Municipalidad de Miraflores, hoy conocida como la sala Luis Miró Quesada Garland. Allí se exhibe el catálogo de la exposición “Galería de Arte” de Emilio Hernández Saavedra. 3. Originalmente el área que ocupa la imagen corresponde a 21,5 por 22 centímetros; pero en 2007, en la muestra “La persistencia de lo efímero” se presenta una ampliación fotográfica de 124 por 124 centímetros; y en 2009, en la Trienal de Chile, bajo la curaduría de Gustavo Buntinx, MICROMUSEO (“al fondo hay sitio”) se presenta una reproducción pictórica de la misma, con las medidas correspondientes a 220 por 200 centímetros, realizado por la artista Sandra Gamarra, por encargo de MICROMUSEO (“al fondo hay sitio”). Juan Salas Carreño
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